Son una parte integral de la fisioterapia y se prescriben comúnmente para tratar una variedad de condiciones que afectan los sistemas musculoesquelético, neuromuscular, cardiovascular y pulmonar. Estos ejercicios están cuidadosamente diseñados para cumplir objetivos específicos, que incluyen mejorar la densidad ósea, ajustar el tono muscular, ya sea inhibiéndolo o facilitándolo según sea necesario, y aumentar la conciencia corporal para un mejor control y coordinación.

Cada programa de ejercicio se personaliza para el paciente, con el fin de elongar los tejidos blandos adecuadamente y movilizar las articulaciones para optimizar su rango de movimiento. Además, estos ejercicios promueven el control neuromuscular y mejoran la mecánica corporal, lo que es esencial no solo para la recuperación de lesiones, sino también para la prevención de futuras complicaciones. Un aspecto crucial de nuestros programas de ejercicios terapéuticos es la reeducación y relajación de los músculos respiratorios, lo que puede ser particularmente beneficioso para pacientes con problemas cardiovasculares o pulmonares. Implementando estas estrategias, ayudamos a nuestros pacientes a recuperar su fuerza, funcionalidad y confianza en sus capacidades físicas, permitiéndoles volver a sus actividades diarias con mayor eficacia y menos dolor.